El P-29 «Deva» causó baja en la Armada

El patrullero P-29 Deva, ha causado Baja en la Lista Oficial de Buques de la Armada, en un acto que ha tenido lugar a las doce de mediodía del viernes 23 de julio en el muelle Juan de Borbón del Arsenal Militar de Cartagena y que ha estado presidido por el Vicealmirante Terán Elices, jefe del Arsenal.

23/7/2004

23/07/2004 · Por Diego Quevedo Carmona La Baja de esta unidad es la primera que se produce dentro de la serie de diez buques gemelos de los que ha formado parte hasta hoy, siendo el tercer buque al que se le arría definitivamente la bandera en el Arsenal cartagenero en lo que va de año, tras las del dragaminas «Genil» y el aljibe «Torpedista Hernández» que tuvieron lugar en enero del año actual, y a las que está previsto se unan también en el último trimestre los dos últimos dragaminas de casco de madera que aún prestan servicio, los «Ebro» y «Odiel».

El «Deva», como sus otros nueve hermanos de serie, («Anaga, «Tagomago», «Marola», «Mouro», «Grosa», «Medas», «Tabarca», «Ízaro» y «Bergantín»), nació como consecuencia de un plan elaborado por la Armada en 1978 que preveía la construcción de los mismos como unidades de vigilancia de zona de las aguas jurisdiccionales españolas, hasta el límite de las 200 millas.

La órden de ejecución de toda la serie se cursó a la Empresa Nacional Bazán de San Fernando con fecha 22 de julio de 1978, mientras que los nombres se asignaron el 11 de enero de 1980, decidiendo en su momento el Estado Mayor de la Armada que todos ellos lucieran los de pequeños islotes de la geografía española y por lo que a esta unidad respecta, la novena de los diez que componían el total de la serie, le fue asignado el de «Deva» en recuerdo de uno situado en la desembocadura del río Nalón, entre Cudillero y Avilés.

Su quilla se arboló el 23 de diciembre de 1980, siendo botado a las tranquilas aguas del Arsenal gaditano de La Carraca once meses después, el 24 de noviembre del año siguiente, para ser recepcionado por la Armada el 3 de junio de 1982.

Con 326 toneladas de desplazamiento, 45,8 metros de eslora, 5,1 de manga y 2,40 de calado, estos patrulleros han dado un resultado excelente, siendo su característica silueta muy familiar por prácticamente todos los puertos de la geografía española.

Por lo que al «Deva» respecta, primeramente sirvió en aguas canarias, para a continuación pasar destinado a Palamós, donde pasó la mayor parte de su vida activa, y ciudad donde la Diputación de Gerona le entregaría la bandera de combate el 14 de junio de 1984, aunque los últimos años, una reubicación de unidades de la Armada hizo que se decidiese destinarlo a la Estación Naval de Mahón, la que ha sido su última base.

En el discurso de despedida del buque, el Teniente de Navío ferrolano Juan Pablo Díaz-Pache Mackinlay, último comandante, hizo una reseña de la vida del patrullero durante los 22 años que ha estado en activo, desde que fue recepcionado en La Carraca por la Armada, que le confió su primer mando al entonces teniente de navío José Javier Díaz Sánchez-Pacheco, presente en el acto de arriado de bandera, junto con otros ex – comandantes de la veintena larga que ha tenido el buque.

Aún siendo siempre triste la baja de una unidad en la Armada, al Deva, como si de donaciones de órganos se tratara, le cabrá al menos el honor de saber que diversas piezas suyas seguirán sirviendo en otros buques gemelos, como el cañón proel, que le ha sido montado al «Anaga» junto con el chigre de la maquinilla de levar, o el motor principal que hará que el «Grosa», que tenía el suyo algo estropeado disponga de él, o incluso el eje, que seguirá moviendo la hélice del «Tagomago», ya que el de éste último quedó mal parado tras un accidente hace unos meses y que le provocó una varada en una playa canaria.

Diego Quevedo Carmona

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Fotografías

La última dotación del buque posa para la posteridad (Diego Quevedo Carmona).

1 La última dotación del buque posa para la posteridad (Diego Quevedo Carmona).

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